SUMA FUTURA
El primer libro de Mara Ajzenmesser funciona como un inventario de lo que hay: escenas cotidianas, viajes, amores, impresiones de la memoria. Pero también, al tiempo que va recogiendo lo valioso en esa especie de lista de poemas frescos, no exentos de humor y reflexión, la voz poética se lanza con espíritu exploratorio hacia un futuro para el que no cree estar del todo preparada. Ese vértigo salpicado de algunas certezas, propio del nadador que está por picar al borde del trampolín, hace de estos poemas un manojo de cosas que una se llevaría en el bolsito, camino del futuro.
La palabra suma viene del latón y quiere decir compendio, conjunto de las cosas que reúnen un saber. En el caso de Suma futura, ese saber parece estar relacionado con una intuición en la que cada vez se confía un poco más, guiándose por los radares de la atención sensible. La de Mara es una poesía que parte de detectar el corazón de cada cosa, y se larga a una caminata "con caídas libres y pendientes", buscando una distancia prudencial entre el mundo y su mirada. Solo gracias a calibrar esa distancia, la experienca se vuelve poema.