UN CRIMEN ARGENTINO
«No todo se transforma. Hay cosas que desaparecen sin dejar rastros. Cuerpos que se borran para siempre.» ¿Se puede disolver un cuerpo? ¿Es posible reducir un ser humano a la nada? Utilizado en cantidades adecuadas; el ácido sulfúrico logra ese efecto. Cuando el proceso llega a su fin; sólo queda un líquido negruzco; turbio; con una capa superficial que tiene aspecto de costra de carbón. Una sociedad también se define a sí misma por sus crímenes; por sus formas de matar. Esta es la historia de uno de los homicidios más brutales cometidos en la Argentina. En diciembre de 1980; con la dictadura aún en su apogeo; el abogado Mariano Márquez decide ejecutar su versión del crimen perfecto. Organiza el secuestro extorsivo de un importante empresario y; para alcanzar la impunidad; imita el terror impuesto por el régimen militar: sin cuerpo no hay delito. Con un estilo implacable; por momentos irónico y siempre efectivo; Reynaldo Sietecase moldea la realidad para construir una historia perturbadora de final imprevisible; cuya trama seduce desde la primera línea y; como una tela de araña; nos atrapa sutil pero definitivamente